Artesanos Cordillerana

En Cordillerana, nos enorgullece trabajar con más de cien artesanos que abarcan todo el país, desde el norte hasta el sur. Cada uno de ellos no solo practica un oficio ancestral con materiales nobles provenientes de la naturaleza, sino que también atesora y transmite saberes que atraviesan generaciones, entre familiares, amigos, vecinos y otras redes. Estos oficios se convierten así en un tesoro de nuestro patrimonio cultural tanto material como inmaterial.

Para los artesanos, su oficio va más allá de una simple labor; es un vínculo profundo con sus raíces y recuerdos de vida. Teresa Huaquil en una entrevista para el libro "Artesanas de la araucanía. Diez testimonios de vida y de amor a un oficio" hecho por Cordillerana, expresó emocionada "Yo crecí en este mundo desde antes de nacer. Mi madre llevaba mucho tiempo trabajando en esto cuando yo estaba en su vientre. Desde que abrí los ojos, vi lo que hacían mis padres... Así uno aprende, observando cada día, sin necesidad de cursos externos, porque en casa tenemos a los verdaderos maestros".

   

La conexión con la naturaleza es fundamental en estos oficios, dado que las materias primas provienen directamente de ella. Esta especial relación hace que los artesanos se esfuercen en tratarla con nobleza y respeto. Lucy Huincateo ilustra este cuidado con sus palabras: "Sacar el voqui requiere saber cómo hacerlo. Si se arranca de raíz, no permite que vuelva a crecer. Para preservarlo, hay que dejar las raíces, ya que el voqui tiene muchas. Así, pueden volver a brotar sin dañar la planta".

 

Así, la nobleza de estos oficios, su riqueza cultural y las historias que los rodean son lo que inspira el orgullo y la felicidad de los artesanos al ejercerlos. Aurora Huenchuñir, artesana en lana de oveja, expresa su profunda conexión con su oficio: "Ser artesana mapuche llena mi vida. Cuando me encuentro en mi telar con la lana, cualquier preocupación parece desvanecerse. Es como una terapia. La artesanía significa todo para mí... Descanso un poco los domingos cuando vienen mis hijas a verme, pero al día siguiente, el llamado de la lana me atrae de nuevo. Realmente amo la lana".

 

De esta forma, en Cordillerana, cada pieza artesanal no solo lleva consigo siglos de tradición y cultura, sino también el amor y el respeto hacia la naturaleza y el arte de crear con las manos que siente cada artesano.

   
   

Fotos por Edgar Dassi Junior para el libro "Artesanas de la araucanía. Diez testimonios de vida y de amor a un oficio".